Fusión e individualidad: la cocina con península

Cuando se dispone de un espacio rectangular y abierto para la cocina y el comedor, una península representa una opción perfecta para separar discretamente los ambientes, manteniendo bien definida la función de cada uno de ellos.

En este estupendo proyecto de Santos Brezo, además de servir de frontera entre los dos sectores, la península cumple la misión de servir de superficie de trabajo adicional, zona de fregadero, práctica mesa para desayunos y un excelente punto de reunión familiar.

La distribución en forma de U, que aprovecha para incorporar al pilar existente, sitúa una batería de muebles de columna en la pared posterior, donde están ubicados los hornos, frigorífico integrable y un buen espacio de almacenaje, ya que se han añadido armarios adicionales hasta el techo.

A su derecha, se encuentra la zona de cocción y la campana decorativa Pando, con un útil mueble de persiana en el rincón, que con luz y enchufes en su interior, es el lugar perfecto para pequeños electrodomésticos.

Curiosamente, la placa de inducción Neff está descentrada sobre la unión de los dos muebles bajos de 1 metro cada uno y que están compuestos de cajones y caceroleros en tres niveles.

Se trata de los modelos estratificados Line-E Blanco Seff y el Minos-Line-E Blanco Seff, con sistema gola contínua, de la firma española Santos, con la encimera de Silestone White Storm de 2 cms. de grosor, electrodomésticos Neff y Pando y fregadero y grifo de la marca Blanco.

¿Resultado? Una estética minimalista en blanco total donde destaca la madera de los taburetes Ondarreta y que hacen de esta cocina una delicia para disfrutar todos los días.

Fusión e individualidad.