Este ambiente, caracterizado por una combinación de materiales propios de espacios industriales, definitivamente, no es para gustos convencionales.
Basado en la atmósfera de los antiguos lofts industriales, evidentemente en lugares muy amplios y luminosos, los muebles y estanterías que componen esta cocina, están fabricados con materiales que emulan a la madera, metales oxidados, vidrio o azulejos.
El resultado es un espacio un tanto bohemio y poco formal que nada tiene que ver con la simetría y el minimalismo, pero que precisamente en ello basa su encanto.
La madera de roble envejecida está presente en las puertas de los armarios bajos y despensas que contrastan con el metal acabado peltre y con sus tiradores.
Además, está combinada con los frentes con decoraciones vintage y en la parte superior una estructura abierta de aluminio en acabado peltre y vitrinas en bronce con iluminación led integrada.
Pero una de los sectores más funcionales es la habitación interna que se puede usar como lavadero y despensa sin romper la estética del conjunto, a la que se accede por una puerta de cristal alineada con las columnas donde está situado el horno.
La zona operativa con fregadero y zona de cocción está terminada con una superficie de trabajo laminada blanco ártico y peltre, mientras que la isla está pensada para almacenamiento y lugar de trabajo, unida a una práctica mesa para desayunos y comidas rápidas.
Es el singular modelo Loft de Snaidero diseñado por Michele Marcon Design.
Debido a la mayor profundidad de las columnas para poder dar más capacidad al lavadero adyacente, el espacio del fondo se ha utilizado para ubicar una cómoda columna despensa extraible. La idea es aprovechar al máximo cualquier hueco disponible.
La campana OSLO de Snaidero, con terminación en peltre, le ofrece un toque nórdico e industrial al mismo tiempo.