Aunque es algo que comúnmente no se toma en cuenta, colocar a diferentes alturas la placa de cocción y el fregadero, puede resultar ideal para una postura óptima.
Precisamente, la ergonomía estudia la adaptación de las máquinas, muebles y utensilios a la persona que los emplea de manera habitual, para lograr una mayor comodidad y eficacia.
Así, en la medida en que la cubeta sea más profunda, obligará a agacharse para trabajar por debajo del nivel de la encimera, más de lo recomendable. No ocurre lo mismo cuando se cocina, ya que siempre estaremos moviéndonos sobre la propia superficie de trabajo.
Todo dependerá de la estatura del propio usuario, pero por lo general, el fregadero un poco más alto con relación a la placa de cocción, puede resultar beneficioso para la espalda.
Y este modelo Arcos Edition de Schmidt, está diseñado para ofrecer esta característica poco usual.
Compuesto por una gran isla con un amplio espacio de preparación y almacenaje, destaca el singular módulo con la zona de lavado, en color Oxid Blue, que se eleva y hace un fuerte contraste sobre el resto del mobiliario blanco mate.
Detrás, en la pared, un conjunto de muebles auxiliares con puertas correderas y módulos abiertos, decoran y le dan una imagen más informal.
Perpendicular a la isla, no pueden faltar los armarios en columna con despensa, hornos y frigorífico. Una estupenda solución, sobria y actual.