Algunas de las cosas que debes preguntarte al pensar en una nueva cocina, es cómo la utilizas, dónde pasas la mayor parte del tiempo y qué tareas realizas principalmente.
Te puedes cuestionar también, cuantas personas viven en casa, cuales son tus costumbres al comprar y qué tipo de cocinero o cocinera eres.
Sin embargo, aparte de esto, hay algo que en cualquiera de los casos, es indispensable: un espacio de almacenaje optimizado y funcional.
Por eso, en una cocina abierta al comedor y salón como esta, sin paredes adecuadas para ubicar el frigorífico y los armarios en columna, hace falta una solución.
Ni a su izquierda ni a su derecha, parece haber espacio suficiente para todo lo que hay que guardar. Además, se hace necesario independizar la cocina del acceso al cuarto de baño adyacente, con el fin de ordenar toda la estancia.
Para ello, los diseñadores de Atelier Moderno, han optado por un bloque perpendicular de columnas en negro mate y que se aprovecha por ambas caras.
Y es que, a falta de pared, los armarios se alargan convenientemente para incluir, además del frigorífico de integración, 3 módulos de 60 cm que servirán para almacenar todo lo necesario en la cocina.
Así también estará todo a mano para cuando se requiera. Las otras 2 columnas auxiliares se sitúan detrás, dejando solo el paso imprescindible para la entrada al baño.
Del resto, la protagonista es una isla central con frentes dorados, como área principal de trabajo y donde se ha incluido también el fregadero.
Y detrás, adosada a la pared, solo está situada una placa de cocción sobre el mobiliario negro mate y con el horno a la derecha. La campana rectangular y un pequeño cuadro decoran ese frente de ladrillos blancos, aunque no parece ser la mejor opción para ese lugar, por su difícil limpieza.
En definitiva, una zona de almacenaje vital en esta estupenda cocina minimalista.
